Este finde, como va siendo normal los últimos, me fui con el R.O.C. (Rollins Outdoors Club) a hacer el canelo por Florida. Esta vez tocaba paracaidismo, pero como bien es sabido, le tengo mucho aprecio a estar vivo, y tuve que sacrificarme y quedarme en tierra. A no ser que cambien mucho las cosas, creo que lo pospondré para mi próxima vida. El salto en si costaba 150 dolares, por seis minutos que te lleva volver al suelo, así que tampoco estaba yo para derrochar dineros (obviamente esta es una excusa con poco peso, pero decir que me cagué me parecía poco fino). De todos modos, y haciendo acopio de voluntad, pagué mis buenos 21 pavos y me subi al avión de copiloto. Es la mar de bonito, hasta que nos quedamos sin tripulación y el piloto le da por bajar en picado, los cojones de pajarita, con el consiguiente cambio de presión y el chirriar de los oidos. Estuve luego 3 horitas oyendo como si tuviese un vaso en cada oreja.
Luego pasamos una buena noche en el camping, con una inhumana cantidad de cerveza para una pequeña cantidad de gente. Un buen pedal, un poco de frisbi, un poco de arrimar cebolleta, un poco de inglés, de español y pa la cama, donde fui banquete presidencial para todos los bichos de la zona.
Al día siguiente por la mañana, vamos, ayer, hubo algunos otros saltos, y por la tarde me junté con unos cuantos energúmenos y nos fuimos a la playa y a la mansión de uno, la de la semana pasada, a vivir otra vez en plan OC durante la tarde, antes de volver pa casa.
Hoy, supuestamente día de estudio, me levanté a eso de las 10, arreglé el tema de las asignaturas a convalidar (gozada hay que decir, que me voy a quedar a un palmo de acabar la carrera), me preparé algo de pasta y me fui a la biblioteca, donde estudié una hora, y luego invertí gran parte de la tarde con una amiga venezolana, que vale, no hablamos en inglés, pero por lo menos tiene conversación agradable, a diferencia de las americanas.
Ese es el resumen en tres patadas de este finde. No soy capaz en estos momentos de escribir ingeniosamente como otros, pero por lo menos daré señales de vida. Una última cosa digna de mención es mi posible viaje a Costa Rica en Mayo, a un curso de verano. La cosa todavía está algo en el aire, pero la verdad es que el tema promete.
Un abrazo chavales
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