domingo, octubre 26, 2008

China & Japón

¡Y llegó la temporada asiática! O lo que es lo mismo, ya queda poco para el final de la temporada. Con una sola carrera por disputar, los dos GP's aquí comentados podrían haber servido a Lewis Carl para sentenciar el mundial, pero aunque haya desaprovechado dos buenas posibilidades para proclamarse campeón matemáticamente y no tener que volver a pasar por el calvario brasileño, sigue siendo el máximo favorito para hacerse con el primer puesto al final. Afrontémoslo, a Massa no se lo imagina de campeón ni su madre; sí, sí, la del rosario en China, ¿o por qué pensabais que lo lleva? Solo un fenómeno SOBREHUMANO puede ayudar al paria de Felipe.

Fuji- Salían Lewis Carl y Kimi en primera línea, Heikki y Fernando en segunda, y Massa y Kubica en la tercera. Menos mal que no estaban los puestos invertidos, ya que de ser así el hábil inglés se los hubiese llevado a todos por delante. Raikkonen y la simple motivación que le queda ahora de joder al inglés se pusieron netamente por delante de él, y como no lo pudo soportar, pues decidió armar el estropicio más grande posible; quemó rueda durante doscientos metros con tal de mantener la primera posición con respecto al finlandés para simplemente conseguir salirse de pista y llevarse consigo a los dos finlandeses. En el desbarajuste posterior Heikki tocó a Kimi. Conclusión: sanción para Lewis Carl por obstaculizar y sacar de la pista a la peña.

No le valió al bueno de Lewis Carl con eso, y mientras Kubica y Alonso tiraban por delante el inglés se salió otra vez en una curva, para acabar por detrás de Massa en la primera vuelta. Según cuentan el inglés tenía que parar a cambiar las ruedas en la segunda vuelta debido al peazo plano que les había hecho, pero antes se la jugó en una maniobra espectacular (de no ser por la víctima) y adelantó a nuestro brasileño pitopáusico favorito a la entrada de una chicane. A la salida de la misma y tras atajar (ojo, de la misma manera que Lewis Carl hiciera en Monza infinitas veces sin ser sancionado) Massa lo embisitió haciéndole trompear y relegándolo a la última plaza. Conclusión: sanción para Massa por adelantar a lo GP2 (preguntas al dr.Alergia, por favor).

Por delante Kubica campaba hacia una victoria que le permitiera seguir con vida en el mundial, pero por detrás tenía al renault de Alonso, quién viéndose más rápido que el polaco pero sin posibilidades de adelantarlo en pista, pidió a su equipo que le hiciera un primer repostaje corto. "Vas a dar seis vueltas menos que él en el segundo tramo de carrera. Tienes que ser mucho más rápido que él." Le dijeron. "Panchus oh, ¿nun véis que soy el más rápidu por aquí?." Respondió él. Y así fue, salió muy rápido en su primera parada y logró arrebatar al polaco la primera plaza, para luego dedicarse a zumbarle bien al renault hasta ganar una ventaja más que suficiente para el segundo respotaje, y finalmente auparse con la victoria. Kubica mantuvo con valentía la segunda plaza, y aunque Kimi tuvo un par de vueltas en las que lo pudo acosar salvajemente, no fue capaz de superarle. ¿Y cuarto? Ah sí, cuarto quedó NELSINHO; y olé. Esto demuestra que Renault se ha puesto las pilas para este final de temporada y qué lástima que no lo haya hecho antes...

Lewis Carl siguió perdido por puestos olvidados, y tan sólo hizo una última y espectacular aparición cuando muerto de rabia porque el asturiano no solo ganaba la carrera sino que lo había doblado, se desdobló de él en la última vuelta de forma aparatosa con derrapajes y frenadas incluidos, para finalmente conseguir desdoblarse y así poder dar una vuelta más. Este tío es tonto, os lo prometo. Massa por su parte luchó como una tortuga panza arriba con una torpeza digna de comentar, por ganar algunos puntos que le permitieran seguir luchando por el mundial. En su camino hacia la octava plaza se topó con Bourdais, el único piloto que ha sido tan masivamente humillado por su compañero de equipo como Piquet, quien al salir de boxes decidió no mirar, tirar p'alante y no frenar a pesar de que un coche le estaba adelantando por la izquierda. Tocó a Massa y le hizo trompear. Conclusión: sanción para Bourdais por idiota y por no saber frenar cuando tienes un coche delante, en forma de un retraso de 25 segundos en la clasificación final de la carrera, lo que permitió a Felipe ganar otro puntito para consolidar un subcampeonato tan poco digno como una visita al urólogo.

Intermission- Si alguien sabe de esto de la F1, es sin duda alguna el energúmeno (Persona furiosa y alborotada según la RAE) culpable de mi nacimiento. Sus años de espectador de este magno deporte datan de los setenta, cuando los pilotos eran fuckers y heavy drinkers, les acompañaban a los circuitos modelos de aúpa, y sufrían una tasa de mortalidad de uno por GP. Fue él quién me dijo a principios del verano: "Los Renault van mal porque son los únicos que han parado el desarrollo del motor, tal y como exige la norma. Los demás han seguido. Cuando vuelvan a desarrollar el motor, volverán a ganar." Meses después uno lee esto, y lo único que puede hacer es esbozar una tenue sonrisa, asentir, y tratar de seguir luchando con el día a día. Cuánto camino por recorrer...

Shanghai
- Llegó el GP de China, también conocido por el sobrenombre de "Cómo volver a sufrir carreras aburridas y sin gracia y no dormirse en el intento." Tras la chocante salida de Japón, los incidentes, adelantamientos y safeties de Singapur, y las carreras de Monza y Spa bañadas por la lluvia, nos topamos de nuevo con el aburrimiento televisado, patrocinado por el banco santander y comentado por dos esperpentos de la humanidad futura (con eso que dicen que todos seremos calvos en unos años... habrá que considerarlos pioneros.) Vamos, que menudo coñazo. Lo bueno que tiene es que se comenta brevemente.

Calificó Lewis Carl por delante de los Ferrari (Kimi, Massa) seguidos por Alonso y por Heikki. En la salida, perdón, en la madre de las salidas dónde nos habían prometido que cielo y tierra se conjurarían para dar alas a Kimi en su camino al choque violento contra el McLaren número 22 del principal candidato al título y que todos debíamos estar preparados para soportar visualmente una de las más espectaculares salidas de todos los tiempos, pasó lo que tenía que pasar: nada. Heikki se coló a Alonso y al asturiano le costó una vuelta recuperar un puesto que se merecía mucho más que el finlandés. Y ya está, se acabó la carrera. Así de fácil.

Podríamos comentar que el Renault aguantó muy bien el ritmo de los Ferrari, y que incluso durante algunos instantes de la carrera se le veía holgado; podríamos comentar que Kubica arruinó su posibilidades de ser campeón el sábado con una mala calificación, y las terminó de arruinar el domingo sacando tres tristes puntos de balance; podríamos comentar que los astutos de McLaren le pusieron a Kovalainen la rueda delantera derecha a la izquierda y la delantera izquierda a la derecha, con el siguiente desbarajuste para el finlandés que acabó abandonando por astío, diría yo; podríamos comentar que Ferrari hizo una maniobra lógica por un lado, pero contraria al reglamento (¿y la sanción?) y fea en cuanto al espíritu deportivo se refiere para conseguir que Massa minimizara la renta cedida con respecto a Lewis Carl; pero al final, deberíamos comentar una sola cosa: qué fácil lo tiene Lewis Carl para arruinarnos el Otoño. O no.

viernes, octubre 17, 2008

Bartleby, el maestro

Me duele la espalda, el respaldo de la silla baila inestable y no es capaz de encontrar la postura correcta; mi espalda digo. Otro documento, otro pasar a limpio, otra base de datos, otro excel de cinco mil entradas... los papeles se entremezclan, el inventario del lunes aparece con los planos del martes y del miércoles... del miércoles no me queda nada; no sé dónde está el miércoles. Levanto la cabeza, dos docenas de mesas delante mío... una extensa retícula, todas iguales a distancias iguales como en la película del Apartamento pero en color, algo que le quita todo el romanticismo. En blanco y negro cualquiera luce más.

Es una oficina fácil de diseñar para el interiorista pero en la que resulta difícil distinguir si el que tiene puesto Radio Olé a tope es el tercero de la cuarta fila o el segundo de la tercera. Toma este informe, a ver si mañana lo tienes ya con el formato dado. Corre prisa.

También es difícil saber quién es el que pone sus altavoces a tope para reproducir los ruidos de pedos a eso de la una y media, cuando ya se ha cansado de trabajar. Por otro lado sí que tengo claro que los que más se ríen de los dichosos pedos son los de las filas tercera y cuarta. Todos los días el mismo ruido, y todos los días se ríen como si lo escucharan por primera vez. Tierno. ¿Dónde estabas el martes? De vacaciones. Me quedaban dos días y me los cogí la semana pasada. Mucho es eso, habla con Arturo y que te pase las hojas de ruta del 52, él te dirá cuáles tienes que modificar. Quién coño será Arturo. Levantas la cabeza y por un momento todos tienen cara de llamarse Arturo.

Sí que tengo claro, por otro lado, que la que está buena es la de la última fila en la esquina izquierda, aunque sólo sea por el tumulto que se arremolina a su alrededor todas las mañanas siendo el sitio más a desmano de todo lo demás, allí sólo ella está a mano; también se nota en que los de la penúltima fila tienen todos tortícolis de tanto volverse. También es fácil distinguir quienes son del Betis (los lunes entran cabizbajos) y quienes del Sevilla (sonríen mucho más). Los que trabajan de veras también destacan sobre el resto; normalmente están de reuniones o viniendo de acá para allá con agilidad, traeme tal documento, envíame aquella presentación de powerpoint, sube al directorio común esas tablas para que las mire. Mañana te digo qué hacer con ellas. La barba pica... quizás debiera afeitarme... no deja, ahora no... al fin y al cabo ya ha pasado todo el verano, el calor se ha ido para no volver hasta el junio siguiente y en el invierno siempre bien... mucho frío... y mucha pereza...

-¿Quieres ayudarme con algo?- venga va, tampoco puede ser tan malo- Toma aquí tienes.

Seis folios garabateados.

-Son los apuntes de la reunión de ayer, una pena que no pudieses venir, ¿me los puedes pasar a ordenador para hacer el acta?- y enarca las cejas, las sube y así le queda cara de ruego, le queda cara de por favor sin necesidad de decirlo, mira qué dócil.

- Sabes una cosa... creo que preferiría no hacerlo.

Una pena que sólo lo haya pensado, que no me haya atrevido realmente a pronunciar las palabras mágicas, podría inventar el abracadabra de la oficina, pero todavía no puedo, no me atrevo aún; tendré que aprender del bueno de Bartleby hasta conseguirlo.

Pausa para un café, y mejor lo tomamos rápido abajo donde máquina, en el rellano, que la última vez que me lo subí a la mesa empapé todo. Aún huele a torrefacto al abrir el cajón. Y nos tomamos el café en el rellano sin hablar mucho y tratando de no pensar en nada. El fin de semana, el tiempo, el sporting, ¿vas al cine? Últimamente poco (creo que quiere decir nada), llego cansado a casa y de lo último que tengo ganas es de ver cine. Otra vez la espalda vuelve a tirar... ¿otro café? Venga, pero rapidito que a las once hay reunión y antes tengo que acabar el post. ¿El post? No perdón, el informe quería decir. Maldito seas Bartleby.

domingo, octubre 12, 2008

Todas las chinas se llaman Susana (crónicas desde el Reino de Espe)


Allá donde se cruzan los caminos,

donde el mar no se puede concebir,

donde regresa siempre el fugitivo…

pongamos que hablo de Madrid.


Hace tres años vivía en Madrid. Hace tres días he vuelto. Vivo de nuevo en Carabanchel, junto al río y el Calderón; el estadio vive sus últimos meses, pronto será un solar destinado a edificar viviendas y llenar bolsillos. El Atleti se muda a la Peineta, llevándose consigo el mayor motivo de orgullo e identidad colectiva el barrio, corren malos tiempos para la lírica. En cuanto al río, en fin, creo que sigue donde siempre pero no podría asegurarlo: con motivo de las últimas elecciones el alcalde se embarco en la faraónica (y a mi juicio necesaria) obra de soterrar la M-30 (ahora calle 30) con el objetivo de romper una barrera arquitectónica que dividía la ciudad y recuperar el río para sus ciudadanos. Muchos fueron los perjuicios que generó el proyecto, demasiados los problemas que han surgido desde su inauguración; pero lo realmente sangrante es el estado actual de la rivera del río. A ambos lados del Manzanares lejos de la hermosa zona ajardinada y peatonal que prometieron (DVD publicitario para cada hogar madrileño incluido) lo único que encontramos es terrenos abandonados que hacen las veces de aparcamiento pirata, nido de ratas y fugaces magreos. La obra ha elevado la altura de la rivera y desde muchos puntos ni tan siquiera se ve el río, eso sí, oler se huele. Afortunadamente las elecciones son cada cuatro años y seguro que para el próximo mandato la promesa se tornará en realidad, con elecciones anuales las cosas funcionarían mejor, o no.


El viernes por la noche salí a pasear el palmito por la noche madrileña, de la que dicen que nunca se acaba. Primera parada: La Latina, precios por las nubes y bares llenos de oligofrénicos enfundados en sus camisetas de Tommy Hifinger y sus vaqueros viejos de 150 euros, las plazas vacías merced a la ley antibotellón y los estudiantes y tirados poniendo pies en polvorosa. Yo adoraba La Latina. Segunda parada: Malasaña, cuna de la movida madrileña y reducto punky, heavy y demás parias. Aquí la cosa sigue como estaba, precios asumibles (nunca baratos) y marginados llorando pogos y borracheras. Las plazas igualmente huérfanas. Tercera parada: Huertas, y es que uno va cumpliendo años y lo que antes era de puretas hoy es de gente que ha vivido mucho y está de vuelta de todo (el que no se consuela es porque no quiere). Sólo estuve en un bar y ya iba cocido al dente, pero me marché con la sensación de que me voy a dejar caer por ahí de vez en cuando. Pase lo que pase siempre nos quedará Lavapies y la sala El Sol.

Cuando volvíamos a casa con la derrota adherida a la piel como Miñññ a una moneda de 10 céntimos abandonada en el suelo, David expuso con trabada oratoria su teoría altamente contrastada sobre el nombre de las chinas, todas se llaman Susana. Le exigí pruebas así que a cada china que nos encontramos en el camino vendiendo cervezas o arroz con niño muerto le preguntaba su nombre. Cuatro chinas después no había dudas: ninguna china se llama Susana. Al llegar a casa cargábamos con un par de litros de alcohol y una pizarra de bar robada en la que se podía leer Todas las chinas se llaman Susana.

jueves, octubre 09, 2008

There can be only one...

Si pasas las tardes delante de tu blog favorito pregúntandote si Ávalon se ha perdido en su camino al Decathlon por las calles de Salamanca o si Juanolo alguna vez volvió de Florida totalmente, en cuerpo y mente quiero decir; si no dejas ni un momento de mirar estas páginas buscando nuevos comentarios que rebatir y anhelando que el señor Uosdwis te revele nuevas verdades sobre la vida, o buceas incansablemente por la biblioteca VirtuaBartoliana rememorando los posts que marcaron a toda una generación (o no), es hora de que lo demuestres.

Para todos aquellos que se saben los mayores expertos mundiales en la idiosincrasia e Historia de este blog, y también para todos los que estéis ávidos por conocer los entresijos de este contubernio, ponemos a vuestra disposición una prueba diabólica y terrible, un instrumento que belcebú tuvo en su poder y desestimó por miedo a que le superara, una prueba que obligó a Indiana Jones a darse la vuelta y volver a casa con su padre, una prueba que provoca la caída de las bolsas europeas en dos puntos cada vez que alguien la nombra por los pasillos de los bancos de Londres a Moscú, una prueba que si San Pedro la instaurara a las Puertas del cielo obligaría a hacer ampliaciones en el infinito y eterno Purgatorio, una Prueba de Vida que ni Russel Crowe disfrazado de romano con Meg Ryan a caballito osaría acometer, ¿eres el mayor experto en VirtuaBartolo del mundo? Demuéstralo.

Ha llegado la hora de descubrir al Máster del VirtuaBartolo.


24 preguntas, cuatro posibles respuestas por pregunta, y aplicando la lógica VirtuaBartoliana, no pienses que la respuesta correcta será la correcta. Todos sabemos que la verdad a veces no lo es tanto y la mayoría de ellas ni siquiera merece la pena conocerla. Elige bien, piensa como lo haría un colaborador del VB guiado por su lógica aleatoria, y si eres un colaborador del VB, no pienses. Por favor. Se permite navegar por nuestra extensa biblioteca de posts, se permite consultar a madres, padres, novias, novios, amigos y enemigos... ojalá os fuera a servir de algo.

¡¡Espartanos!! ¡¡Desayunad!!

¡¡Frosties!! ¡¡Café!! ¡¡Tostadas con mantequilla!!

.... ¡¡Y Zuumoooo!!...


miércoles, octubre 08, 2008

Resúmen del viaje

- "No quiero perder el tiempo escuchandote hablar de tu viaje, así que resúmelo en dos fotografías."

Autofoto captando nuevo duelo de titanes con mi archienemiga en la plaza de San Márcos.

Dolce vitta en Budapest.

Ha sido un gran viaje sin duda alguna....

martes, octubre 07, 2008

Cronología de la crisis

Interesante cronología de los hitos que han marcado la economía mundial en estas últimas fechas. Tantas subidas y tantas bajadas, tantos lunes negros, martes grises y miércoles soleados donde todo vuelve a subir acaban mareando a uno.
Un poco de orden se agradece.

miércoles, octubre 01, 2008

Spa & Monza & Marina Bay

¡Y llegó la lluvia!

No es la primera vez que desde aquí se protesta contra el tedio al que nos someten las carreras de F1 últimamente domingo sí y domingo también, a menos que intervengan la providencia, dios, los accidentes espectaculares orquestados por Juan Pablo II en busca de la santidad seguidos por un safety car, o la poderosa lluvia. Pues esta vez hubo ración doble, ¡y vaya ración! Cambios de estrategia, adelantamientos, remontadas, fracasos, sorpresas, y espectáculo, mucho espectáculo. Un par de carreras que nos han rememorado los tiempos en los que los coches y los simuladores no decidían los resultados en un 95%, y los verdaderos pilotos daban la talla y los mediocres hacían eso, el mediocre. Así-que-ya-saben,-si-parpadean-se-lo-van-a-perder-porque-esto-es,-la-fórmula-uno-en-estado-puro. Serás marica, Serrano.

Spa Francorchamps.- Amenazaba lluvia y la lluvia llegó. Durante el fin de semana llovió de forma alterna, y así hubo prácticas en seco y en mojado. Finalmente en la clasificació no hubo excesivas sorpresas y Lewis Carl, Massa, Heikki y Kimi coparon las dos primeras líneas. En la salida Kimi demostró que no sólo era consciente de lo que le urgía recuperar puntos de cara al campeonato, sino que además tenía ganas ir a por él, así que se quitó de encima a su compatriota y a su compañero. Después presionando a Lewis Carl sobre una pista seca pero no en exceso, se benefició de que el inglés diera un trompo en la horquilla de final de recta para conseguir el liderato en dos vueltas. Pintaban oros para el finlandés. La carrera transcurrió de forma tranquila, y aunque al principio la pista estaba algo húmeda se fue secando de forma progresiva (prueba de ello resulta el hecho de que Alonso en las primeras vueltas seguía de cerca a Massa, y según se avanzaba perdía ritmo con los de delante). Para cuando se repostó por segunda vez Kimi lideraba por delante de Lewis Carl, Felipe y Fernando. Por detrás, los dos BMW luchaban con los dos ¡Toro Rosso! Formidables.

Y entonces se revolucionó todo. Hamilton adelantó a Kimi con su ya famosa e histórica maniobra, y cuando parecía que la victoria iba a ser suya con facilidad, empezó a caer una tromba de agua descomunal. Los coches casi se tuvieron que parar en seco, y las tres vueltas finales se convirtieron en un auténtico calvario. Lewis Carl se salió, lo que permitió a Kimi recuperar el liderato momentáneamente, hasta que dos trompos sucesivos lo retiraron de la primera posición primero, y de la carrera después. Los nervios hicieron mella en el finlandés de hielo, y al ver que las opciones de doblar su título de campeón se le escapaban, forzó por encima de sus posibilidades. ¿Error de principiante? No lo creo; las condiciones eran demasiado extremas y se podría haber salido cualquiera de los tres que luchaban por el título, le tocó a él porque tenía que arriesgar más que los otros dos, y ya se sabe lo que puede ocurrir cuando se arriesga...

Total, que en tiempo real vimos como Lewis ganaba, Massa le secundaba, y completaba el podium un Heidfeld que, habiendo sido más listo que nadie en la carrera, paró a poner ruedas de mojado a dos vueltas del final y tuvo tiempo de remontar todas las posiciones hasta el podio. Cuarto fue un excelente Alonso, que de haberse atrevido a cambiar ruedas en la penúltima vuelta en lugar de en la última, hubiese contactado con Lewis Carl y Felipe, dado que ambos aguantaron con ruedas de seco y se tuvieron que arrastrar por el circuito las dos últimas vueltas (Massa más que el inglés, por supuesto).

Luego llegó la sanción que retrasó a Lewis Carl 25seg y por lo tanto lo dejó en el tercer escalón del podio, quedando por fin definida la clasificación final. Bien, a estas alturas y habiendo pasado ya cerca de tres semanas del incidente resulta un poco inútil debatir sobre la sanción, pero este blog se escribe pensando en la posteridad, en las civilizaciones futuras que poblarán la Tierra siglos después de que nosotros nos hayamos ido, y entonces tenga que asumir su papel de Biblia del futuro y documento Histórico al mismo tiempo. Pues para todos ustedes queda la sentencia:

La sanción fue más que correcta.

Aunque sólo sea porque así el mundo hizo justicia con este panoli que escribe, y se compensaron los gritos, alaridos, gestos, muecas y espasmos de dolor que se marcó tras ver como el inglés de marras hacía trampas y se volvía a salir con la suya. Lo diga quien lo diga, Lewis Carl TOMÓ VENTAJA DE LA MANIOBRA DE ADELANTAMIENTO, cosa que el reglamento prohíbe. En concreto, el reglamento prohíbe valerse de atajos al circuito tanto para adelantar, como para adquirir cualquier tipo de ventaja con respecto a los contrarios. Reconozco que es muy fácil observar esta adquisición de ventaja cuando el que va detrás adelanta al primero, y al devolver la posición todos quedamos contentos. También acepto el hecho de que es más que difícil que el piloto pueda devolver los 1,083seg que tenía de desventaja antes de entrar a la curva, pero hay un hecho que marca la diferencia y demuestra de manera unívoca que el inglés consiguió ventaja: si hubiese frenado en la chicane (variable que por cierto él en ningún momento evaluó, a deducir por sus declaraciones) al ver que el finlandés le había ganado la posición, habría entrado en la recta de meta detrás de Kimi, y hubiese comenzado a acelerar un breve instante de tiempo después. Ahora bien, teniendo en cuenta lo PEQUEÑA que es la recta de meta de Spa, es IMPOSIBLE que un coche le gane el rebufo al de delante y le meta el morro en la horquilla. A menos que el primero frene (como sutilmente quiso sugerir el inglés), no hay forma. Bien por los comisarios, y bien por el que escribe, que todavía guarda un leve atisbo de objetividad en sus juicios. Mal por el inglés llorica y por toda la prensa inglesa, que lloraron tanto toda la semana clamando a los cuatro vientos la injusticia que se había cometido contra el deporte (estos cuando protestan, lo hacen a lo grande) que les ha subido el nivel del mar medio metro, y han perdido un 15% del territorio de las islas. Se jodan.


Intermission.- Que aquí quede escrito y así mi opinión no pueda cambiar. Nunca. No me gustan los tipos que como Lewis Carl, o el propio Schumacher en su época, obligan a la ley a renovarse a cada paso que ellos dan, formándola a su justa medida. Las normas están muy claras, y los únicos que "no las entienden" obligan a cambiarlas ajustándolas a su moldura sin que nadie se pueda explicar por qué. La pregunta resulta entonces obvia, ¿por qué cambiarlas? Que les dejen seguir cometiendo las mismas infracciones y que les sigan sancionando por ellas, los demás no tenemos ningún problema con ello, todo lo contrario. Lo triste es que al final no es así, al final la ley flojea y claudica, y uno tiene la sensación de que las normas están para cumplirse por una mayoría, y para correr detrás de unos pocos privilegiados que intentan ir un paso por delante. Esperemos que a éste no le den tanta coba como al alemán.


Monza.- Llegamos a Italia con amenaza de lluvia, con el mundial revuelto, con Ferrari con ganas de comerse a los ingleses, y ¿qué hace la prensa española? Hablar del equipo por el que va a fichar Alonso la temporada que viene. Lo peor es que nadie protesta. Que penita y qué dolor que damos a veces de tanto mirarnos al omgliguillo... but let's race!!

Probablemente asistimos a una de las calificaciones más emocionantes en mucho tiempo, más aún teniendo en cuenta que la verdaderamente emocionante fue la Q2. Unbelievable! Ver a Lewis Carl y a Kimi dar vueltas sin parar para tratar de meterse entre los diez primeros, y no ser capaces de rodar a menos de cinco segundos del primero, si encima tenemos en cuenta que el primero era Vettel, no tiene precio. Así que con ellos dos fuera de la Q3, Vettel se llevó una brillantísima pole que junto con el cuarto puesto de su compañero Bourdais hacen que nos preguntemos cómo coño reglaron sus coches los Toro Rosso. Kovalainen fue el único de los grandes que rodó bien y quedó segundo, y Massa sufrió para calificar sexto. El domingo prometía.

Llovía tanto que se decidió salir tras el safety car para así evitar ostiazos a final de recta, y salvo Bourdais, que caló el coche antes de la vuelta de formación y tuvo que salir desde boxes, el resto salieron sin más inconvenientes. Vettel mantuvo la posición y Raikkonen y Lewis Carl avanzaban posiciones muy tímidamente, hasta que a las pocas vueltas el inglés se entonó y empezó a rodar bien. Dio cuenta de Raikkonen con relativa facilidad, y ahí comenzó una racha arroyadora. Rodaba varios segundos más rápido que el resto de coches en pista y parecía que podía alcanzar el podio, sobretodo cuando comprobamos que encima llevaba la estrategia de parar una sola vez. Para cuando volvió de boxes estaba ya séptimo. Los Ferrari llevaban la estrategia de parar dos veces, algo normal en Massa que entró pronto, pero extraño en el caso de Kimi que esperó a parar tanto como el inglés. Pensé que por qué coño los italianos se dejaban combustible para otra parada, hasta que me di cuenta de lo obvio: Ferrari esperaba otra parada obligatoria, ya que contaban con que dejase de llover. Y así fue.

Hasta la mitad de carrera la lluvia había sido brutal, lo que había establecido diferencias muy grandes entre unos coches y otros debido a los reglajes, y así vimos como mientras el inglés volaba, los Ferrari sufrían mucho para mantener el ritmo y mientras tanto, Vettel campaba a sus anchas libre en primera posición y con Heikki lejos en segunda. Otro que lo estaba pasando muy mal era Alonso, y su ritmo torpe hizo que se arriesgara como no lo hizo en Spa: entró el primero en boxes a por intermedios revolucionando la carrera. No sólo no se salió, sino que empezó a rodar el más rápido en pista; parecía que iba a poder recuperar muchos puestos hasta que a las tres vueltas empezaron a entrar todos como posesos. Hamilton fue uno de los últimos en entrar, y cuando salió lo hizo detrás de Massa (al que había superado con su estrategia de una parada); pronto empezó a acercarse a él notablemente, hasta que a las pocas vueltas degradó gomas y perdió ritmo. ¿Quién empezó a rodar bien entonces? El de siempre: Kimi. Iba enormemente retrasado hasta que la pista empezó a secarse, momento en el que comenzó a marcarse vueltas rápidas como churros. Espero que la gente se convenza con esto de que, a pesar de que hay mucha diferencia entre unos pilotos y otros, no es tanta como la que Lewis Carl exhibió a principios de carrera o la que el finlandés mostró al final; se trataba en ambos casos de los reglajes, y el McLaren salió reglado para lluvia extrema y el Ferrari para lluvia media. Ninguna de las dos estrategias resultó ser la mejor, ya que finalizaron séptimo y noveno.

Vettel ganó dominando de principio a fin y con holgura, de la misma forma que Alonso hiciera años atrás en Hungría en 2003. Kovalainen le secundó y Kubica y Heidfeld firmaron unos excelentes tercero y quinto que les sirvieron para demostrar que aunque BMW está flojeando en este final de temporada, no han perdido el hilo del todo. Fernando por su parte firmó un más que sobresaliente cuarto puesto, continuando la buena racha que lleva en este final de temporada. Massa finalizando sexto restó un punto al inglés, nimio botín para lo que debería haber sido Monza, no olvidéis que el Toro Rosso monta motor Ferrari.


Intermission (y II).- Da igual, tú grita y llora y protesta muchísimo, y si tienes a toda la prensa inglesa de tu lado mejor, a ver si así consigues que parezca que han cometido contra tí un crimen imperdonable y harto injusto (aunque en el fondo la sanción haya sido lo más justa posible), ¿que para qué? Pues para que en el próximo GP todas las miradas se posen en los estrictos comisarios que tan duramente te sancionaron, no vaya a resultar al final que tienen algo contra tí. De esta forma conseguirás que les tiemble la mano muy mucho a la hora de sancionarte de nuevo sin importar lo sospechosas que sean tus acciones, y sin embargo no tendrán dudas a la hora de ser estrictos con tu rival... digamos que se llame Felipe, y conseguir así que a él le obliguen a deshacer un adelantamiento (por poner un ejemplo absolutamente aleatorio) argumentando que se ha saltado la chicane, cuando resulta que tú te la has pasado por el forro TODAS las veces que has pasado por encima de ella. Eso es buena psicología. Llorica.


Singapur.- Justo cuando van y nos hacen descansar de la lluvia, llega la noche. El primer GP nocturno de la historia de la F1 tuvo lugar en Singapur, y amenazaban sopor y tedio en la tarde del domingo, tal y como sufrimos en el GP de Valencia. Por suerte para todos, el resultado fue completamente distinto. Independientemente de los safety cars y del resultado final de la carrera, en este circuito pudimos ver adelantamientos en carrera y estrategias de boxes distintas. Si bien es cierto que el safety car le dio un giro inesperado, el circuito se portó mucho mejor que el español, así que espero que los ingenieros valencianos tomen buena nota de las diferencias, fueran cuales fuesen.

Los tres primeros salieron en las mismas posiciones en las que calificaron, Massa, Lewis Carl y Raikkonen. Los dos primeros luchando por el título y el tercero tratando de joder al inglés. En las primeras vueltas Kimi se vio retrasado y el inglés se acercaba peligrosamente al brasileño, hasta que (como siempre) empezó a sufrir degradación en las gomas. Massa se distanciaba y Kimi se acercaba al inglés en lo que prometía ser un buen doblete de Ferrari y un serio golpe de autoridad en ambos campeonatos. El azar de la vida y la nulidad mental de los italianos invertirían la situación por completo.

En un plano paralelo de la realidad, a más de 30seg de la cabeza de carrera, Alonso iba decimotercero. Al parecer su coche funcionaba a las mil maravillas en este trazado y así lo había demostrado en los libres de todo el fin de semana, pero una avería en la bomba de la gasolina en plena Q2 lo dejaron en la posición 15 de parrilla, lejos de los puestos de cabeza. Salió con una estrategia arriesgada (tres paradas en un circuito urbano) y aunque en la salida adelantó a tres, y unas vueltas más tarde dio cuenta de Trulli, pintaban bastos para el asturiano cuando entró a boxes para hacer su primer repostaje apenas transcurridas doce vueltas de carrera. Entonces la realidad invirtió colores, los astros se aliaron, y a Piquet alguien le empezó a susurrar sutilmente "óstiate, so cabrón... óstiate... contra el muro... así..." y el brasileño se ostió. ¿Resultado? Alonso era el único que había repostado en ese instante, y Rosberg y Kubica cual enfermos de próstata no se pudieron contener y tuvieron que entrar justo cuando el pitlane estaba cerrado, contrayendo la consiguiente sanción (también llevaban una estrategia a tres paradas). El resto de pilotos esperaron a que abrieran el pitlane para entrar, y cuando yo me lamentaba por la mala posición de Kimi (tendría que esperar a que Massa repostase y perdería puestos con respecto a Lewis Carl), la realidad me golpeó en la cara cual manguera (mente limpia, que os veo) desbocada.

Massa el ilustre, hábil entre los hábiles, hizo lo impensable. Es cierto que el semáforito ese que se gastan en Ferrari en lugar de la mítica paleta ya les había dado problemas (¿en Valencia?), y es cierto que se puso en verde antes de tiempo. Pero, ¿cuántas veces hemos visto a un piloto que arranque antes de tiempo con la manguera aún enganchada? Muchas. Ya. ¿Y cuántas veces el piloto ha arrancado de cuajo la puta manguera y se la ha llevado puesta, pasándola por encima de un inocente mecánico? Ahí el honor sólo recae en el más grande. Lamentable también el equipo, que se liaron se liaron, y ante tal desconcierto, tardaron más de lo normal en repostar a Kimi y lo mejor de todo, se olvidaron de que aunque Massa se había llevado la manguera, alguien tendría que quitársela cuando se parase; a la entrada de boxes de hecho. Resultado: Los dos Ferraris se vieron a la vuelta de boxes el antepenúltimo y el último. Dios los guarde en su gloria.

Por delante las cosas pintaban emocionantes, y la estrategia Piquet-suicidate-suicidate-ya daba frutos y Alonso marchaba quinto, detrás de Rosberg, Trulli, Fisichella y Kubica, mientras que por detrás marchaban los Red Bull y Lewis Carl, el único de los pilotos de cabeza a los que este desconcierto no había arruinado la carrera. En este momento, un escalofrío recorrió la espalda del que escribe cuando la televisión ofreció una conversación de radio entre el asturiano y su ingeniero, la cuál decía: "has salido con el pitlane cerrado; esperamos una sanción." ¿En serio a Alonso le habían cerrado el pitlane en la cara? Afortunadamente no. Un malentendido del equipo nos tuvo en vilo un buen rato. Los que sí que no se libraron de la sanción fueron Nico y Robert; lo que sumado a las pesadas estrategias de Trulli y Fisico de parar una sola vez y verse hundidos en la clasificación tras su primer repostaje nos deja con un claro líder de carrera: ¡Bravo Fernando!

A partir de ahí sólo un segundo safety car nubló la victoriosa marcha del asturiano. Por detrás Rosberg, que sólo se vio privado de la victoria por la penalización del stop&go y Lewis Carl, excelente tras el descalabro de los Ferrari y que corrió con mentalidad de campeón, pensando más en el mundial que en la carrera, y si se quitó de en medio a los Red Bull no fue por arriesgar sino por atacar en el momento preciso protegiendo siempre su posición de carrera. ¿Los Ferrari? Bueno, Massa se volvió a arrastrar por un circuito mostrándonos una lamentable colección de trompos, salidas de pista y desastres varios para demostrar una vez más que no merece el título de campeón. ¿Y Kimi? Otro que tal baila. Remontó meritoriamente, hizo la vuelta rápida en carrera varias veces, se acercó a los puestos de delante, y cuando marchaba quinto, sin nadie por detrás y sin poder acercarse a Glock que marchaba por delante, se chocó contra el muro él solo. Eso sí, con la suficiente caballerosidad como para aparcar el coche destrozado en una zona muerta y no obligar al safety car a cerrar la carrera.


A estas alturas sólo queda una pregunta por responder: ¿En qué coño pensaba Ferrari al renovar a sus dos pilotos?