martes, noviembre 06, 2007

Salamanca 07

Bueno, supongo que tarde o temprano se dajará caer alguna crónica de nuestra aventura. Siendo yo parco en palabras, os dejaré aquí un pequeño avance de lo que pueda venir de ahora en adelante. Como sabeis aquí cada uno tiene su papel, y el mío es hacer fotos y trucarlas, así que no le pidamos peras al olmo.

5 comentarios:

Morvader dijo...

JAjajaja.

Todavía no he decidido que me hace más gracia.Si la posición fetal de Juanigol o la cara de apalominao de Prallong el multicolor.

Dicho lo cual, comentar que este montaje de Juan es mucho mejor que todos esos en lo que pegó su cara alrededor de rubias cachondas

Unknown dijo...

viendo los lugares relevantes que se dejan ver en la foto, y centrándome más en la estatua de un cerdo, podría afirmar, sin temor a equivocarme, que en realidad estabais en Noreña.

BJ dijo...

No digo que no hubiese estado bien lo de trapiñarse un ser vivo recién nacido en Charrosisk, pero sigue siendo peor plan que irse con Kimi a celebrar el mundial, aunque mucho mejor que ir a rescatar azafatas al Chad con Sarko.

Por cierto, llevo varios días esperando que alguien diga algo que es bastante evidente, y me extraña que no se haya comentado. Menos mal que Sarkozy no fue a liberar a la Gallega de Cancún, porque si no habríamos tenido que verle a él enseñando la baguette en la portada de interviú, colgando del escaparate de los quioscos...

srcocodrilo dijo...

ahora lo comprendo todo. Delia tenía ganas (muchas) de cochinillo, Álvaro se comió el cochinillo, Angel y Pablo vieron como Álvaro se comía el cochinillo delante suyo y no les dio nada. Paloma y Clara disfrutaron sentadas y tranquilas de todo el espectáculo del cochinillo, Juanolo se hizo una foto a sí mismo alargando mucho el brazo, y Vicky se enfadó. Por todo.

Mientras tanto, en algún lugar de Salamanca, un cochinillo de piedra sonríe feliz, mientras murmura algo así como que le encanta que los planes le salgan bien...

Álvaro dijo...

Que conste que yo no comí cochinillo sino cabritillo. Aunque lo probé. Y el jabalí. Y las carrilleras. Y hoy voy a comer queso fundido, perdón, raclette...
Es duro ser un gordo juerguista.
Lisa, Charromanca es como Noreña pero sin la extraña fijación por los callos propia de la Villa Condal no barcelonesa. Lo podrías comprobar si vinieras de visita pero... ya sabes...